Carlos Torres al borde de declarar por el caso Villarejo tras no testificar la directora jurídica de BBVA
El presidente del BBVA, Carlos Torres, tiene todas las papeletas para ser citado a declarar en la Audiencia Nacional por las relaciones del banco con el excomisario José Villarejo, después de que la directora jurídica del banco se haya negado a testificar esta mañana. La Fiscalía Anticorrupción ha solicitado que, en ese caso, el que debe ser citado es el propio Torres.
La directora jurídica del banco, María Jesús Arribas, se ha escudado en una consulta realizada al Colegio de Abogados que, según ella, le exime de declarar para no vulnerar el derecho de defensa del banco. No obstante, preguntada por los abogados de las acusaciones, ha admitido que no ha pedido dispensa al BBVA para poder colaborar con la Justicia. La entidad sí concedió esa dispensa a PwC, cuyo representante declaró sin problemas en la Audiencia.
La posible citación de Carlos Torres, que se produciría a partir de septiembre, es muy relevante para el futuro del BBVA. En principio, declararía como testigo, pero si el juez Manuel García Castellón decide imputarle tras su testimonio, las normas de honorabilidad del BCE le obligarían a dimitir como presidente del banco.
En un escrito en el que se oponía al recurso del BBVA contra la declaración de Arribas (que no será visto hasta septiembre), la Fiscalía señala «el alto grado de conocimiento de lo que había pasado con Cenyt que tenían Torres Vila y María Jesús Arribas» y añade que, «si la ejecución de la delegación la hubiese realizado el presidente del banco», debería ser Torres el que declarase, «al no ser abogado» y ante la imposibilidad de que lo haga su subordinada».
Según Anticorrupción, Torres formaba parte de un comité restringido que en octubre de 2018 dio de alta «un Proyecto estrictamente confidencial sobre las actuaciones de comprobación de la relación de BBVA con la empresa Cenyt». Ya en 2019, el consejo de administración del banco acordó, «por unanimidad», facultar a Torres y a Arribas para que «cualquiera de ellos indistinta y solidariamente» pudiera proceder a la designación de la persona representante del banco en la causa. En consecuencia, si Arribas no declara acogiéndose al deber de secreto profesional, el que debe hacerlo es Torres, según esta argumentación.
Arribas ha aludido al resultado de su consulta al Colegio de Abogados pero no ha revelado el contenido de dicha consulta. Fuentes presentes en la declaración aseguran que la respuesta del Colegio es genérica y habla de que el secreto debe aplicarse cuando afecte al derecho a la defensa en términos generales, pero sin entrar en este caso concreto.
En este asunto subyace la cuestión de si el secreto profesional que rige las relaciones abogado-cliente se aplica también cuando el imputado es empleador y no cliente del letrado. Existe abundante jurisprudencia del TJUE (Tribunal de Justicia de la Unión Europea) que establece que el secreto no se aplica en este caso, citada por el abogado de Antonio Béjar, exdirector de riesgos de BBVA. No obstante, una de las abogadas del banco ha asegurado este viernes que dicha jurisprudencia no es aplicable en este caso, según las fuentes.